«...y lo asustó la sospecha tardía de que es la vida, más que la muerte, la que no tiene límites.» (El amor en los tiempos del cólera)
«A mí me hubiera gustado morirme por mi cuenta, pero si mi destino era ese yo tenía que asumirlo.» (Noticia de un secuestro).
«El cuerpo humano no está hecho para los años que uno podría vivir.» (Del amor y otros demonios).
«Volverán –dijo-. La vergüenza tiene mala memoria.» (La mala hora).
«Un buen escritor puede ganar buen dinero. Sobre todo si trabaja con el gobierno.» (Vivir para contarla).
«…si yo hubiera sabido que mi hijo iba a ser presidente de la república lo hubiera mandado a la escuela…» (El otoño del patriarca).
Gabriel García Márquez. Foto: Random House