El pianista i compositor Carles Viarnès va aprofitar l'obligat període de confinament de la primavera per posar la mirada sobre tres cançons d'estils ben diferents i transportar-les cap al seu univers sonor. Una d'elles és La leyenda del tiempo, amb música de Ricardo Pachón i text basat en un fragment de l'obra de teatre Así que pasen cinco años, de Federico García Lorca, que va immortalitzar Camarón de la Isla (5 de desembre de 1950-2 de juliol de 1992). L'acompanyen Pols, d'El petit de Cal Eril, i Podría ser peor, de La casa Azul, amb què Viarnès va bastir l'EP Ecos (Bankrobber).
Descobrim la reinterpretació al piano d'un clàssic del flamenc, acompanyada de l'original, tal com va publicar-se el 1979.
El sueño va sobre el tiempo
flotando como un velero,
flotando como un velero.
Nadie puede abrir semillas
en el corazón del sueño,
en el corazón del sueño.
El tiempo va sobre el sueño
hundido hasta los cabellos,
hundido hasta los cabellos.
Ayer y mañana comen
oscuras flores de duelo,
oscuras flores de duelo.
El sueño va sobre el tiempo
flotando como un velero,
flotando como un velero.
Nadie puede abrir semillas
en el corazón del sueño,
en el corazón del sueño.
Sobre la misma columna,
abrazados sueño y tiempo,
abrazados sueño y tiempo,
cruza el gemido del niño,
la lengua rota del viejo,
la lengua rota del viejo.
El sueño va sobre el tiempo
flotando como un velero,
flotando como un velero.
Nadie puede abrir semillas
en el corazón del sueño,
en el corazón del sueño.
Y si el sueño finge muros
en la llanura del tiempo,
ay, en la llanura del tiempo,
el tiempo le hace creer
que nace en aquel momento,
que nace en aquel momento.
El sueño va sobre el tiempo
flotando como un velero,
flotando como un velero.
Nadie puede abrir semillas
en el corazón del sueño,
en el corazón del sueño.