Nunca podría vivir en el campo,
yo quiero neurosis y supermercados.
El tráfico lento me calma y me ayuda a pensar.
Están transformando el espacio urbano,
no caben más guiris, me echan del barrio.
En la periferia mi vida ha vuelto a empezar.
Ahora la ciudad es nuestra,
tomad lo que queráis:
modernismo, playa, sexo y fiesta.
Sé, buscas el calor de un largo abrazo
porque han cortado la calefacción.
Nunca estaremos tan cercanos
en veinte metros cuadrados de amor.
Es maravilloso, oh, oh.
Es maravilloso, oh, oh.
Me lees un verso de Biedma en voz alta,
yo te recito el recibo del agua,
en tan poco espacio las musas se van del salón.
Pasan los días, me tiendes la mano,
que está sujetando un test de embarazo,
el resto es historia y quién vence la cuenta mejor.
Los tres estamos en el cielo,
nos sobra un colchón
para dos turistas suecos y su perro.
Sé, buscas el calor de un largo abrazo
porque han cortado la calefacción.
Nunca estaremos tan cercanos
en veinte metros cuadrados de amor.
Es maravilloso, oh, oh.
Es maravilloso, oh, oh.
Sé, buscas el calor de un largo abrazo
porque han cortado la calefacción.
Nunca estaremos tan cercanos
en veinte metros cuadrados de amor.
Sé, buscas el calor de un largo abrazo
porque han cortado la calefacción.
Nunca estaremos tan cercanos
en veinte metros cuadrados de amor.
Es maravilloso, oh, oh.
Es maravilloso, oh, oh.
Foto: Facebook Sidonie